1 oct 2009

Coro...

Cómo contarlo, por dónde empezar...

El ensayo arrancaba 19.30 pero como en nuestros ensayos no comenzamos hasta 19.45. Dos ejercicios de vocalización y derecho a la Misa Brevis de Kodaly. Eramos unos 40, todos jovenes (me sentía un poquito viejo jaja). Calculo que las edadeas van de los 20 en adelante, nose, pero muchos cantaban como profesionales, sin ir más lejos el tenor que tenía al lado mio bien podíamos dejarlo cantando solo que nadie iba a notar la diferencia...

Todos cantaban las partes como si la supieran, saltamos de parte en parte sin que el director siquiera las cantara ni una sola vez. Solamente indicaba el compás, o el número de referencia y todos cantando.

Bien dije, quizás la habían ensayado el ensayo pasado (les cuento que era el segundo ensayo nomás) pero a medida que avanzaba el ensayo y seguían cantando como si la sabían cambié la idea y dije que quizás la venían cantando desde el año pasado, era demasiado lo que sabían como para haberla ensayado en un solo ensayo, al coro de la UNS bien podría haberle llevado meses.

Tipo 20.30 hubo un descanso y le pregunte a este tenor que tenía al lado qué onda, si ya la habían ensayado, si había grabaciones, si la sabían. Y me respondió que no, que era recién el segundo ensayo, que en su caso trabajaba de cantante, pero que no la habían ensayado previamente.

Uffff... seguimos media hora más, tranquilamente este coro podría cantar en un concierto la semana que viene, o la otra... Para esto al terminar el descanso el director pidió que todos llevaran amigos, que teníamos que ser al menos 100 o no iba a funcionar.

Terminó el ensayo, hablé un ratito con el director y efectivamente todo había sido LECTURA A PRIMERA VISTA. La Misa Brevis de Kodaly casi completa en una hora y media de ensayo, divisis, matices, pronunciación...

Y enseguida pensé en papá, sufriendo en cada ensayo, repitiendo las partes una y mil veces. Enseguida pensé en aquellos que se aprenden las partes rápido y sufren cuando las repetimos una y mil veces. Enseguida recordé las veces que hemos dejado obras inconclusas.

Un coro asi es el "sueño" de cualquier director supongo, simplemente darle las partituras y trabajar pequeños detalles, gustos personales, comentarios. No tener que andar planificando ensayos ni teniendo que cambiar de planes por ausencias o porque simplemente no sale.

Me quedé muy sorprendido, realmente MUY sorprendido. Esperaba diferencias, pero esto fue como demasiado. Igual me gusta nuestro coro, quizás bien podría haber un punto medio entre esta "perfección" y nuestra forma de trabajo.

Abrazo,
Fran

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